INTERSECCIONES
Vengo pensando en el camino, que de dónde ha salido, que hacia dónde va, que a dónde lleva y que todo se cruza.
La curva redonda me inclina la cabeza, pero también el torso. Se contradicen las manos y se cruzan, como todo. Y tengo que agarrarme el corazón para no perder nada de vista y no dejarme vencer por la fuerza centrífuga.
Porque vengo pensando que todo se cruza, que a dónde voy, que para qué. Que en qué estará pensando, que cual porqué es el que da peor sombra y mejores vistas.
El semáforo parpadea amarillo, allá, un poco más lejos, en donde todo se cruza. Yo sigo pensando en el trayecto, en si torcer antes de tiempo. O confiar en el camino, seguir recto y dejar correr las manecillas.
Entonces, mientras pienso que todo se cruza, siento un pellizco. El corazón se arruga, se escapa el aire, el zapato que pisa. Chilla la goma, se abalanza el pulso y suda el instante, pero el hierro se queda frío. Amarillas se quedan las caras del otro coche que se atraviesa conmigo.
No hay disculpas por debajo del amarillo, que para eso seguimos vivos mientras todo se cruza, mientras se entrelazan los finales y los principios. Que seguiremos vivos mientras se nos arroben los ojos, mientras se entornen las puertas, mientras se resista el olvido.
Traspaso el umbral, porque me das permiso, y pienso en cómo se cruza todo. En qué piensa, en a dónde va, en cómo te quedas y en con qué poco basta para no seguir más allá y darlo todo por perdido.
Yo te cuento que todo se cruza, que el coche no me vio llegar, que todo sigue amarillo, incluso en la tercera edad. Y que, por eso, allá, un poco más lejos, un tanto después, se seguirá cruzando todo.
Entonces pienso en cómo nos vamos cruzando, parpadeando. Pienso en el amarillo que nos espera a todos, allá, un poco más lejos, en donde se trenzan las dudas, en donde se atraviesan los sueños, en donde las vidas se cruzan.
Y me voy preocupado, porque todo se cruza, porque todos nos movemos y porque nadie sabe nunca cuando pisarán los otros el freno, ni por qué, ni por quién. Ni quién lo pisará primero o si nos atravesaremos a la vez.
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